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domingo, 22 de enero de 2017

GIRA EL MUNDO, GIRA

Hubo un día en que creíste que podías con todo sin límites, o mejor dicho, creíste que el mundo se había inventado para ti. 
Hubo un día en que las cosas se quedaban cortas, nada era suficiente y siempre querías más de todo y de todos.
Hubo un día en que descubriste la vida, un día en el que tocaste con tus dedos la felicidad más absoluta; ahora puedes decir que la felicidad sí tiene techo, porque tú te golpeaste la cabeza con él.
Un día en el que restarle importancia a las cosas o no darle juego a los problemas, era todo lo que sabías hacer. Un día en que tu mayor preocupación era pintarte las uñas y no hacerte un empastre. 
Nada era tan grave como para perturbar, nublar u opacar tu alegría dentro de tu micromundo.
Un día en que las responsabilidades, los miedos y las dudas, no molestaban tanto, porque eso era cosa de mayores. Ese día en el que estabas total y absolutamente convencida que la vida, la habías inventado tú y que estabas por encima del bien y del mal.

Pero qué decir, que no sepamos todos, pues ese tiempo pasa y pasa muy deprisa, dejando atrás sonoras carcajadas sin el peso de un día a día adulto, constante y tenaz, dejando en la estantería aquellos esmaltes de uñas color carmín, secos al paso de los días, semanas, meses y años, porque ya no tienes tiempo para atenderlos. Ahora quedan fotos, muchas fotos, en las que es probable que ni te reconozcas, con esos ojos pintados de un negro ahumado, que al final, has comprendido que no necesitas. Ahora apuestas por una naturalidad, que aunque siempre hayas llevado dentro, sabemos que no siempre se es capaz de mostrar. Ahora abres el armario y aún sigue ahí, alguna prenda de ropa, que por simple nostalgia ocupa un lugar en tu closet; esos pantalones que no te quitabas ni para dormir de lo que te gustaban o ese otro vestido, que muy probablemente, sea de alguna amiga y te agenciaste con todo tu amor o por qué no decirlo, el pijama infantiloide que todavía sigues usando. Aquellas conversaciones que siempre acababan haciéndote reír muy fuerte, o tardes en un parque, viendo el tiempo pasar. Ese que pasando, te ha traído hasta aquí. Un regalo de algún cumpleaños ya lejano, te observa cada día en tu habitación o el recuerdo ya borroso, de las rozaduras de los tacones. 

Hubo un día en que te sostenían los demás, la mano de tu padre, el abrazo de tu madre, la economía de ambos, el que no llegaras tarde o al menos que llegaras sana y salva a casa, en esos fines de semana locos, que no tenían fin. Ahora eres tú misma contigo, y aunque les sigues teniendo, es hora de que pienses tú más en ellos que ellos en ti. Hoy eres tú quien te coges de la mano, del brazo, de la pierna o del pelo, de donde prefieras, pero te agarras fuerte para no dejarte caer. Hoy eres tú la que te das una palmadita en la espalda o coges impulso cuando un mal pensamiento te dice que no puedes más. Hoy estás tú aquí, con tus desvelos y tus sonrisas, con tus inquietudes y tus alegrías, sin esmalte de uñas o con él, con el pelo arreglado o con una coleta, ya no importa nada. Hoy has visto la muerte, la niñez, los que se van, los que vienen, el ciclo de la naturaleza. Hoy has comprendido que hay que ser dura, que la cabeza es una buena consejera y el corazón un mero guía. 
Hoy sabes que el mundo no se creó para ti, pero sí sabes que tu vida, la inventas tú cada día.
Con tus sueños y tu lucha. Tú, contigo misma. Y eso, también es felicidad. Felicidad básica y tiene recompensa, lo sé. 
Y mientras tanto, deja que el mundo siga girando.





Esta canción, no creo que necesite presentación.

https://www.youtube.com/watch?v=B8wQauN_Aco

"Al final, las obras quedan, las gentes se van". 


domingo, 15 de enero de 2017

NADIA SABE NADA.

El linchamiento social en España, no es algo nuevo, eso está claro. Sólo hay que remontarse unos 24 años atrás, cuando tres niñas desaparecieron, para más tarde ser encontradas asesinadas, en un más que sospechoso y vergonzoso caso que abrumó este país, más concretamente mi comunidad y que, con una supuesta fuga y un encarcelamiento sin pruebas, selló los corazones de la ciudadanía, pudiendo así, con el dedo inquisidor, apuntar sin temores al ejecutor de los hechos. Por suerte aún hay quien mantiene viva en la memoria, la llama de aquello. Ni olvido, ni perdón.

Pues, como decía, el linchamiento no es algo actual, pero sí algo especialmente acentuado con las nuevas tecnologías y en un sistema en el que pensar, a veces parece que salga muy caro. Y es que hoy quería hablar de Nadia; sí, esa pequeña, expuesta por sus padres, supuestamente para ganar dinero a su costa, inventándose una enfermedad que supuestamente no existe y que más tarde han sido encontradas, unas supuestas fotos con contenido sexual, que supuestamente estaban en el ordenador de sus progenitores. En fin, todo son supuestos que los medios de información se olvidan de mencionar y con ello no quiero exculpar a los padres, no soy yo la voz de la justicia, pero si son supuestos son supuestos, y es que el tema ya comienza a empachar. Y aquí es donde empieza el linchamiento sin límites, los comentarios maleducados y el entretenimiento que, a la hora que pongas la televisión, va a estar detrás de la pantalla. Diana Quer ya no vende.
Me gusta estar informada, pero no me gusta que se dé la misma información diez veces por día y no sé si será casualidad, pero las supuestas fotos de alto (y cada vez más alto) contenido sexual de Nadia, aparecen el mismo mes y la misma semana en la que se piensa modificar el copago a los jubilados y sube un 32% la luz. Pero, ¿eso no es tan importante como para tenerlo en los medios, 12 de 24 horas que tiene el día? Parece ser, que conviene linchar a unos, pero a otros no tanto. A otros es mejor lincharlos de forma suave y moderada, de modo flojito, que mañana esa noticia que afecta a todos los españoles sea historia en nuestras cabezas y por ello, de forma suave, moderada y flojita, nos cuentan cosas que interesan y mucho. 
Os aseguro que el copago es algo realmente incómodo cuando estás detrás de un mostrador de farmacia. Es incómodo pedir dinero por algo que no se toma por gusto, que no es un capricho. Hablo con conocimiento de causa, porque es mi oficio y hay quien se ofende y qué se puede decir ante eso, está en todo su derecho de quejarse, pero ¿hará algo al respecto? Esas noticias, las solapan a otras, que siendo interesantes, no lo son tanto como para estar a todas horas en los medios, y al solaparlas a algo que está en boca de todos, como es ahora el caso de Nadia, pasan muy desapercibidas. Entonces llegas a la farmacia y ya te la han colado, te la están metiendo doblada en tu cara, y no se puede hacer nada al respecto. Te enterarás antes de que la persona que está detrás del mostrador te diga que tienes que pagar 5 euros por tus medicamentos de enfermo crónico y te enterarás también antes de que llegue el recibo de la luz por encima de tus posibilidades, pero para ese momento será tarde, porque ya te habrán empachado, ya habrás engullido todo lo que quieren contarte antes de lo que realmente te interesa. Porque un empacho, conlleva una dieta blanda. Blandita y flojita, ya saben. Y en la calle, no se habla de lo que nos concierne, os lo aseguro. 

Yo quiero la verdad, poder leer un periódico y creerme lo que dicen, confiar en el periodismo, que para algo está, luchar y quejarme por mis derechos como ciudadana y de Nadia, oye, de Nadia que se encargue la justicia y no un pueblo ignorante que se echa las manos a la cabeza ante una condena de muerte, pero que condena en vida por las redes sociales, mientras pone el culo para que le den más fuerte.
Nadia sabe nada.  





Paraíso - Para ti.

https://www.youtube.com/watch?v=rWYDamfpzl8

"Para ti, que sólo tienes quince años cumplidos. Para ti que naciste en tiempos asesinos".