https://twitter.com/carolcarol91

martes, 3 de noviembre de 2015

24.

Hoy es mi cumpleaños y me encanta.
Siempre me ha gustado cumplir años, desde que tengo uso de razón, este día lo siento mío y solo mío, incluso me da rabia que alguien los cumpla el mismo día que yo y tenga que compartir mi fecha, mi 3 de noviembre.
Odio noviembre, lo cierto es eso. Yo tendría que haber nacido en un mes de sol y calor, de playa y tirantes, de días eternos y noches muy cortas... Sin embargo ni siquiera fui concebida en verano, porque si las cuentas no me fallan, mis padres debieron celebrar el San Valentín de 1991 por todo lo alto, así que no, mi aniversario nada tiene que ver con mi estación del año favorita y me tocó llegar al mundo en el mes que más odio. Aun así hago honor al carácter de una buena Escorpio, por lo tanto, creo que no podría haber sido ningún otro signo zodiacal.



Una de las razones por las que más odio cumplir años este mes, es porque demasiados años he tenido cumpleaños pasados por agua, cancelación de celebraciones por esta razón y recuerdo soplar las velas más de una vez y de dos con mucho frío. Tengo suerte que desde hace unos años, Lorenzo se porta bien en mi aniversario, aunque por otro lado puede que esto no sea tan bueno...

El caso es que me planto aquí, hoy y ahora con 24 años, que es cierto, no son muchos, pero sí han pasado realmente deprisa. 
Haciendo un poco de balance, sigo siendo la misma persona que cumplía 14 hace diez años o los 18 hace ya seis. Tengo las mismas razones para sonreír, los mismos motivos por los que quejarme (aunque eso va en aumento), las mismas personas a mi lado (y alguna más que con los años he agregado) y la misma ilusión por lo que me ilusiona, aunque las ilusiones cambien con el tiempo.
Me falta una persona que durante 22 años estuvo a mi lado con cada tarta, y este es el segundo que no va a estar. Es obvio que no me olvido de ella, ni hoy ni nunca, y que le mandaré un trocito de pastel allá donde se encuentre. Pero la vida sigue y creo que eso he aprendido del año pasado, de este año y de cualquier otro año. La vida no se detiene nunca, por nada, ni por nadie y siempre hay que estar orgulloso de poder cumplir, porque eso significa que estás vivo y mientras estás vivo las cosas pueden ser maravillosas. 




Cuando llega este día me gusta agradecer. Normalmente lo hago para mis adentros, pero aprovecho el blog para dar las gracias a todos los que durante tantos años llevan aguantando mi mal carácter, mi manera de contar cualquier tontería como un acontecimiento especial, mis bromas a veces pesadas, mis gritos cuando me cabreo, mi lengua envenenada cuando algo me enfada o mis lágrimas cuando tengo un mal día. Y que a pesar de todo, sigan a mi lado y que en días como este se esfuercen por hacerme feliz sabiendo lo que me gusta y conociéndome tan bien, con detalles que dejan muda, hace que no pueda sentirme más orgullosa de tener a mi alrededor a las personas que tengo. Son las adecuadas, las que encajan en el puzzle de mi camino. Espero estar a la altura que ellos merecen y compensarles mis defectos con virtudes que hagan sus vidas más fáciles. La mía desde luego la hacéis especialmente sencilla.


Y sumando otro noviembre, sabiendo que el mundo nunca deja de girar, creo que siempre debemos tener una apuesta para ganar. Lo poquísimo que sé de la vida es que nada es una emergencia que no se pueda arreglar, mientras el corazón siga latiendo y el amor vuelva a ganar. 





Y como siempre, hoy también toca canción y no, no es el "Happy Birthday".
Iba a colgar November Rain, pero claro, no llueve hoy, así que no pega. Eso hubiese estado mejor ayer. 
He elegido este tema de Mika, el "Blame It On The Girls", porque sonaba el día que me examiné del teórico hace ya unos cuantos años y aprobé, así que desde entonces le tengo un cariño especial además de transmitirme muy buena energía.

https://www.youtube.com/watch?v=iF_w7oaBHNo


"Life could be simple but you never fail to complicate it every single time "

No hay comentarios:

Publicar un comentario